Levemos em conta que a nossa Constituição estabelece como uma
das garantias do cidadão, a Segurança. Nem consideremos os demais itens como
Educação e Saúde, apenas Segurança! Na outra ponta, demos relevo ao nível de
corrupção reinante, que está vinculada ao desaparecimento dos recursos
financeiros previstos para esses fins; consideremos, também, o aparelhamento do
Estado, caminho pelo qual outras tantas centenas de milhões de reais se esvaem
para grupos políticos que pretendem manter o poder por décadas, para ...
praticar maleficências, claro!, em favorecimento de poucos; e, finalmente,
visualizemos a inapetência de trabalhar governando e a inépcia nos parcos
momentos quando isto é feito.
Pronto, na notícia abaixo, está o resultado desse corolário
trágico da ação governamental, e apenas neste segmento, pois dentre as
cinquenta cidades mais violentas do mundo, temos a “honra” de ter 15 delas, ou,
aproximadamente, 30%.
Observo, ainda, que há um parágrafo analisando a questão do
desarmamento, salientando que é uma medida que não resolve o problema, mas,
apenas, põe a descoberto os inocentes.
SEGURIDAD, JUSTICIA E PAZ
Por segundo año
consecutivo, San Pedro Sula (Honduras) ocupa el primer lugar mundial en el
ranking de las 50 ciudades más violentas del mundo, con una tasa de 169
homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes. A la ciudad mexicana de Acapulco
correspondió el segundo sitio con una tasa de 143 en 2012 y a Caracas el tercer
sitio, con una tasa de 119.
Del ranking de 2012
salieron las siguientes ciudades que figuraron en el de 2011: Durango, Mazatlán, Tepic, Veracruz de México; Mosul de
Irak; Panamá de Panamá y Johanesburgo de Sudáfrica.
Al ranking de 2012 ingresaron las ciudades de Valencia y
Maracaibo (Venezuela); Santa Marta (Colombia); Puerto Príncipe (Haití);
Victoria (México); Oakland (Estados Unidos) y Brasilia (Brasil).
Respecto a las ciudades hondureñas de San Pedro Sula y Distrito Central encontramos,
a diferencia de anteriores ocasiones, una gran dificultad para obtener
información para realizar los cálculos necesarios. No nos sorprendería que esta
falta de información de fuentes oficiales respondiera al propósito de intentar
de ocultar la realidad de las ciudades del país que es, hoy por hoy, el más
violento del mundo (aunque seguido muy de cerca por Venezuela).
En tal sentido
llama la atención que se haya dado a conocer el número de mujeres asesinadas en
Honduras, por departamento
y por ciudad, y en cambio no se haya hecho lo mismo con los totales de
homicidio. Si las autoridades hondureñas saben cuántas mujeres fueron
asesinadas, también sabe cuántos homicidios de hombres hubo.
Por tanto, tomamos una decisión: repetimos las cifras
oficiales de 2011 (que son, por cierto, superiores a las que calculamos para el
ranking de ese año), pues resulta obvio que si hubiera habido una disminución
-por pequeña que fuera- las autoridades hondureñas se habrían apresurado a dar
a conocer ese logro. Pero por la información que puede leerse todos los días,
en las ciudades hondureñas la situación no mejora, sino que empeora.
Autoridades de San
Pedro Sula nos han reclamado que el haber colocado a esa ciudad en el primer
lugar en el ranking perjudica su imagen. También han argüido que nuestras cifras son erróneas. Pero nos
basamos en cifras oficiales y respecto al efecto del ranking, que no hace sino
reconocer la realidad, no es éste el que daña la imagen de la ciudad, sino su
violencia y la incapacidad de los gobernantes para contenerla y reducirla.
Ocultar los problemas jamás los resuelve.
Si se comparan los rankings de 2011 y 2012 hay evidentes mejoras y retrocesos en el
control de la violencia en varias ciudades de diferentes países. El
mayor deterioro de la seguridad pública y el escalamiento de la violencia se ha
producido en los últimos años en Honduras, Venezuela y México.
Respecto a las mejoras están ahí los casos de las ciudades que
salieron del ranking y la disminución de las tasas en varias urbes aunque hayan
permanecido en esta lista. En México durante 2012 hubo reducciones importantes
de los homicidios en ciudades de los estados de Chihuahua, Sinaloa, Durango, Veracruz y Nayarit, pero ha empeorado
en los estados de Guerrero, Coahuila y Tamaulipas.
El caso más relevante de reducción de los homicidios es el
de ciudad Juárez, Chihuahua, urbe que durante tres años consecutivos (2008,
2009 y 2010) ocupó el primer lugar mundial entre las urbes más violentas del
mundo y que en 2011 pasó al segundo lugar y en 2012 a la posición 19. Mientras
que en 2010 Juárez alcanzó una tasa de 229 homicidios dolosos por cada 100 mil
habitantes, en 2012 fue de 56: una baja de casi el 76%.
En 2011 la ciudad
mexicana de Tijuana, que en 2010 ocupó el lugar 22, salió del ranking.
Descarga ESTUDIO COMPLETO
Otro caso notable
de reducción es el de San Salvador y en general de El Salvador. La razón de la baja es la
tregua pactada por las pandillas rivales con los auspicios del gobierno
salvadoreño. La capital de ese país pasó de una tasa de 59 homicidios dolosos
en 2011 a una de 32 en 2012, lo cual es una muy buena noticia.
En principio estamos a favor de todo aquello que permita
una reducción de la violencia e impida la pérdida de vidas humanas, todas
valiosas. Pero en este caso compartimos el fundado temor de muchos salvadoreños
de que la tregua no se mantenga. Pero además, el punto no es la tregua entre
grupos criminales, sino la existencia misma de estos.
La escalada de violencia, sobre todo en América Latina, ha
servido para que diferentes
actores culpen del fenómeno a la posesión y portación de las mismas y promuevan
prohibiciones y campañas de desarme. Nosotros no compartimos ni el
diagnóstico ni el supuesto remedio propuesto.
La posesión y portación de armas y su uso, que es parte del
derecho fundamental de todo individuo a la autodefensa (cuando en un momento y
lugar concretos no esté la policía para protegerlo), no es la causa de la
violencia. En México la portación de armas está prohibida y la posesión muy restringida,
sin ello haya impedido la escalada de violencia de los últimos años. En países con menos restricciones a las armas
hay mucha menor violencia que en otros donde prevalecen las prohibiciones y las
restricciones.
Las prohibiciones y el “desarme” no detienen a los
delincuentes violentos que siempre tienen forma de obtener armas. Las
prohibiciones sólo desarman a las personas inocentes y las dejan más inermes
ante los criminales.
El siguiente paso en la política de desarme, una vez
establecidas las prohibiciones, son las requisas masivas de hogares, centros de
trabajos y vehículos, propias de los Estados totalitarios y genocidas.
La solución a la
violencia consiste en dos tipos de acciones principales: el creciente y sistemático abatimiento de la impunidad y
el hacer que la policía cumpla con sus tareas de prevenir y perseguir los
delitos, con escrupuloso respecto de los derechos fundamentales de los
individuos. Eso es lo que demuestra la larga experiencia universal y lo que ha
seguido comprobando eficaz en recientemente lo mismo en Colombia y que Brasil.
Finalmente
aprovechamos la oportunidad para reiterar que el propósito del ranking que
realizamos no es eminentemente académico. Lo que perseguimos es contribuir al
reclamo que los diferentes pueblos del mundo hacen a sus gobernantes para que
cumplan con su obligación de proteger los derechos de los individuos a la vida,
la propiedad y la libertad.
Posición
|
Ciudad
|
País
|
Homicidios
|
Habitantes
|
Tasa
|
1
|
San Pedro Sula
|
Honduras
|
1,218
|
719,447
|
169.30
|
2
|
Acapulco
|
México
|
1,170
|
818,853
|
142.88
|
3
|
Caracas
|
Venezuela
|
3,862
|
3,247,971
|
118.89
|
4
|
Distrito Central
|
Honduras
|
1,149
|
1,126,534
|
101.99
|
5
|
Torreón
|
México
|
1,087
|
1,147,647
|
94.72
|
6
|
Maceió
|
Brasil
|
801
|
932,748
|
85.88
|
7
|
Cali
|
Colombia
|
1,819
|
2,294,653
|
79.27
|
8
|
Nuevo Laredo
|
México
|
288
|
395,315
|
72.85
|
9
|
Barquisimeto
|
Venezuela
|
804
|
1,120,718
|
71.74
|
10
|
João Pessoa
|
Brasil
|
518
|
723,515
|
71.59
|
11
|
Manaus
|
Brasil
|
945
|
1,342,846
|
70.37
|
12
|
Guatemala
|
Guatemala
|
2,063
|
3,062,519
|
67.36
|
13
|
Fortaleza
|
Brasil
|
1,628
|
2,452,185
|
66.39
|
14
|
Salvador (y RMS)
|
Brasil
|
2,391
|
3,642,682
|
65.64
|
15
|
Culiacán
|
México
|
549
|
884,601
|
62.06
|
16
|
Vitoria
|
Brasil
|
1,018
|
1,685,384
|
60.40
|
17
|
New Orleans
|
Estados Unidos
|
193
|
343,829
|
56.13
|
18
|
Cuernavaca
|
México
|
359
|
640,188
|
56.08
|
19
|
Juárez
|
México
|
749
|
1,339,648
|
55.91
|
20
|
Ciudad Guayana
|
Venezuela
|
578
|
1,050,283
|
55.03
|
21
|
Detroit
|
Estados Unidos
|
386
|
706,585
|
54.63
|
22
|
Cúcuta
|
Colombia
|
346
|
637,302
|
54.29
|
23
|
São Luís
|
Brasil
|
509
|
1,014,837
|
50.16
|
24
|
Medellín
|
Colombia
|
1,175
|
2,393,011
|
49.10
|
25
|
Kingston
|
Jamaica
|
568
|
1,171,686
|
48.48
|
26
|
Belém
|
Brasil
|
1,033
|
2,141,618
|
48.23
|
27
|
Cape Town
|
Sudáfrica
|
1,722
|
3,740,026
|
46.04
|
28
|
Cuiabá
|
Brasil
|
380
|
839,130
|
45.28
|
29
|
Santa Marta
|
Colombia
|
209
|
461,810
|
45.26
|
30
|
Recife
|
Brasil
|
1,656
|
3,717,640
|
44.54
|
31
|
Valencia
|
Venezuela
|
977
|
2,227,165
|
43.87
|
32
|
Chihuahua
|
México
|
367
|
843,844
|
43.49
|
33
|
San Juan
|
Puerto Rico
|
185
|
427,789
|
43.25
|
34
|
Goiânia
|
Brasil
|
547
|
1,302,001
|
42.01
|
35
|
Puerto Príncipe
|
Haití
|
495
|
1,234,414
|
40.10
|
36
|
Victoria
|
México
|
126
|
333,517
|
37.78
|
37
|
Pereira
|
Colombia
|
167
|
462,230
|
36.13
|
38
|
Nelson Mandela Bay
|
Sudáfrica
|
415
|
1,152,115
|
36.02
|
39
|
Maracaibo
|
Venezuela
|
784
|
2,212,040
|
35.44
|
40
|
ST. Louis
|
Estados Unidos
|
113
|
319,294
|
35.39
|
41
|
Baltimore
|
Estados Unidos
|
217
|
619,493
|
35.03
|
42
|
Curitiba
|
Brasil
|
597
|
1,751,907
|
34.08
|
43
|
Oakland
|
Estados Unidos
|
131
|
395,817
|
33.10
|
44
|
San Salvador
|
El Salvador
|
744
|
2,290,790
|
32.48
|
45
|
Macapá
|
Brasil
|
160
|
499,116
|
32.06
|
46
|
Durban
|
Sudáfrica
|
1,065
|
3,442,361
|
30.94
|
47
|
Monterrey
|
México
|
1,305
|
4,230,716
|
30.85
|
48
|
Belo Horizonte
|
Brasil
|
1,452
|
4,882,977
|
29.74
|
49
|
Brasilia
|
Brasil
|
764
|
2,570,160
|
29.73
|
50
|
Barranquilla
|
Colombia
|
349
|
1,186,640
|
29.41
|